La clave del disfrute es que está ligado al presente. Al presente y a tu atención en el presente.
Recordar algo agradable, soñar con algo fantástico, o imaginar un futuro cautivador, prometedor… puede traer cierto tipo de placer, por supuesto. Pero obviamente nunca será lo mismo que disfrutar la experiencia que estés viviendo en el presente.
Además, el pasado y el futuro no son más que ideas surgiendo en el presente. Y muchas de esas ideas terminan siendo nada más que distracción. Un impedimento para estar aquí.
Hoy vamos a disfrutar la meditación. Acéptame esa invitación a ver cómo se siente.
MEDITACIÓN GUIADA:
Recuerda, el disfrute lo encuentras en el momento, con tu atención. El disfrute está en la consciencia plena de la experiencia física, sensorial y cognitiva. Los desencadenantes del disfrute están a nuestro alrededor, en cualquier parte: un pájaro cantando, un atardecer, un café con amigos, una mirada de complicidad, sábanas frescas, un abrazo, la lluvia, la cena de esta noche… cosas cotidianas y comunes.
Si podemos encontrar en nosotros mismos la calidad de atención para disfrutar la vida, nunca tendremos que esperar a que llegue ningún futuro. Y aunque no siempre está disponible, nuestra capacidad para disfrutar siempre está en espera… y podemos entrenarla.
Lo importante es que no se nos olvide. Que no se nos olvide disfrutar la meditación de vez en cuando. Y sobre todo que no se nos olvide disfrutar la vida también.
Gracias por tu práctica con todomente.
Es un honor estar guiándote en la meditación.
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